Me he venido hasta aquí (...) para hablar sólo un poco, muy poco, con algún transeunte y preguntarle una dirección. En esta ciudad, donde la respuesta es siempre la misma: "Destra, sinistra, sinistra, destra, destra, sinistra e altra volta sinistra".

Antonio Gala: Los papeles de agua.

lunes, 17 de octubre de 2011

El Sueño de África. (Javier Reverte)

(...)

- ¿Y cuál es su religión?
- No soy creyente.  –respondí.
- ¿Pero cual es su Dios?
- Ninguno. –dije.

-¿Y se puede vivir sin Dios? –preguntó espantado.
- A mí no me hace demasiada falta. –respondí.


- ¡Dios existe! –exclamó excitado y con los ojos muy abiertos.
- No para mí, Abú. –contesté.

Pareció abatido. Caviló unos instantes. Luego dijo:
-         Qué extraño es… En Inglaterra, en Francia, en su país… hay mucha gente que no tiene Dios. Aquí creemos todos. Qué extraño. Fueron ustedes quienes trajeron la religión a estas tierras. Hubo guerras y mártires.  Y ahora son ustedes los que no creen en sus dioses.
            Dígame, ¿para qué los trajeron?


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